En un grupo en el que solamente son dos los boletos para llegar a la Hexagonal final de la eliminatoria, el panorama luce complicado para la Selecta, con rivales que de alguna forma u otra nos conocen y nos tienen tomada la medida.
México, Honduras y Canadá serán los obstáculos que la Selecta deberá vencer para poder clasificar a la ronda final de la eliminatoria, rivales duros y difíciles, por lo que habrá que sacar la calculadora y hacer del Cuscatlán un fortín para tener cierta ventaja cuando el momento de devolver las visitas se presente.
El camino comienza con la peor de todas las visitas, se jugará ante México en el Azteca el 13 de noviembre y cuatro días más tarde, el 17 viviremos el encuentro ante Canadá.
Luego, llegará Honduras, concretamente el 25 de marzo, en el encuentro que se jugará también en el Cuscatlán, y cuatro días más tarde (29) viajaremos a la capital catracha para devolver la visita recíproca.
Desde marzo, no habrá fecha en la fase de grupos, sino, hasta septiembre, donde se recibirá a México el día 2 y devolveremos la visita a Canadá el día 6, fecha en que se termina la fase de grupos y para ese entonces ya deberíamos saber si clasificamos o nos quedamos eliminados anticipadamente.
El camino es rocoso y brusco, pero como dije antes, de conseguir victorias por partido en el Cuscatlán, el camino podría allanarse en buena forma y estaríamos obligados a por lo menos conseguir algún empate o algo más en las visitas a Honduras o Canadá, un resultado adverso en casa y entonces el panorama definitivamente se volvería turbio.
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