Atlético Marte y un nuevo descenso

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TEHABLODEFUTBOL.COM / Atlético Marte va camino de segunda división nuevamente, y como motivos se pueden esgrimir muchos, de peso o no, sin merecerlo o no, lo cierto es que, parte de culpa se puede atribuir en gran medida al horror dirigencial que impera en nuestro fútbol, ese mismo que no permite que el tema selección prospere, se sigue cebando con los equipos a los cuales toca.

La inversión (gasto) de $100,000 para comprar la categoría de honor, finalmente se fue a la basura, y es que, nunca será lo mismo gastar tal cantidad para reforzar las bases, asegurar un futuro y trabajar con un proyecto que al corto o largo plazo permita jugar en una categoría mayor con todos los beneficios que conlleva -si es que los tiene-, pero el caprichoso deseo del dirigente de mantener un equipo ruinoso deportivamente hablando en la actualidad permite que ocurran este tipo de desastres como es perder la categoría dos años seguidos.

No se va a negar nunca el legado histórico del bombardero, como tampoco lo ocurrido hace un par de años cuando Atlético Marte regresó a todo vapor a ser uno de los grandes protagonistas del torneo, pero que se quedó a las puertas de regresar a una final porque se quedó sin gas en el momento más inoportuno.

Desde entonces, el bombardero fue más penas que glorias, hasta que tocó fondo, dos descenso consumados, y tan solo uno de ellos, el primero, agotado con el recurso económico, comprar la categoría para alargar el calvario, sin reorganización, sin ajustes, sin ideas, sin proyecto… queda más que claro que la improvisación nunca será la más sabia de las decisiones, y en esto del fútbol, al final la factura a pagar es demasiado alta, y no alcanzan $200,000 para cubrir los errores ni hacer olvidar las malas decisiones.

El equipo regresará a donde debió haberse ido hace un año, a curarse las heridas, a tomar conciencia plena que para volver a primera división se debe tener cabeza fría y trabajar paso a paso el retorno, formar un proyecto que de resultados en el largo plazo y no esperar ganar títulos a las primeras de cambio, las prisas al final, son malas consejeras.

Quizá, es un golpe demasiado fuerte para aquellos marcianos de sangre azúl, que se que los hay aún en estos días, y son ellos los llamados a exigir a sus dirigentes que no manejen esto como un negocio personal, si no que estén abiertos a cambiar el rumbo del barco, a ser pacientes y a creer que en base al trabajo y a decisiones certeras el equipo puede regresar al lugar perdido.

Por ahora, la plaza marciana quedará vacante y quién sabe cuando la volverá a ocupar el azul bandera.

Post Author: JoseMa@Díaz

Bloguero y enamorado del fútbol.